miércoles, 2 de marzo de 2011

CRISTINA PIDIÓ “UN POQUITO DE EDUCACIÓN”

La barra de Cobos salió maltrecha

Publicado el 2 de Marzo de 2011

Néstor no se murió, Néstor vive en los pibes que están cobrando la asignación”, el grito se hacía estruendo en el recinto de la Cámara de Diputados, la presidenta Cristina Fernández miraba las galerías colmadas y se le humedecían los ojos. Diputados y senadores aplaudían de pie. La jefa de Estado acababa de anunciar la extensión de la Asignación Universal por Hijo, que a partir de mayo será un beneficio y un derecho desde el tercer mes de embarazo.
El emotivo marco que acompañó uno de los anuncios más importantes de la apertura de la Asamblea Legislativa sirvió como demostración de lo que se vivió ayer en el Congreso.
La hora y cuarenta minutos de exposición de la presidenta estuvo interrumpida por aplausos, gritos, cánticos, cruces entre las barras y algún reclamo desde las bancas opositoras.
El blanco principal de los cruces entre barras fue el vicepresidente opositor Julio Cobos, quien ante la imposibilidad de lograr el silencio de un pequeño grupo radical ubicado en una de las galerías recibió de parte de la presidenta un seco: “Un poquito de educación, dígale a su gente que se quede tranquilita, por favor”, acompañado de una leve palmada en el brazo. Así, Julio Cobos también podrá ser recordado como el primer vicepresidente en ser reprendido en Cadena Nacional. Ante nuevos gritos desde al pequeño sector de militantes radicales, la presidenta miró hacia su bloque y dijo: “Después nos dicen a nosotros que no respetamos las instituciones.” Luego de ese cruce, la presidenta apeló a la ironía para desmentir las versiones de una reforma de la Carta Magna y dijo: “No puedo lograr que me aprueben el Presupuesto, cómo voy a pensar en una reforma constitucional.” (ver p. 5)
Una vez terminado el discurso, el pasillo que une el Salón de los Pasos Perdidos con la puerta que lleva al despacho de la presidencia de la Cámara Baja se pobló de personas. Allí se fundieron en un abrazo el jefe de la bancada oficialista, Agustín Rossi, con el ministro de Economía Amado Boudou. Al mismo tiempo, a escasos tres metros, el ministro del Interior Florencio Randazzo debatía, en tono amable, con Felipe Solá uno de los hits mediáticos del día: las lista de adhesión.
Entre rezongos opositores y el buen ánimo oficialista, el palacio legislativo se fue vaciando lentamente. Uno de los legisladores del GEN disparó contrariado por el pasillo: “Hay que irse de vacaciones al país de Cristina, ahí está todo bárbaro.” Mientras, la Plaza de los Dos Congresos, aún colmada de militantes que escucharon desde allí el discurso, despedía a la presidenta al grito de “Borombombón, borombombón, para Cristina la reelección”

(Fuente: Tiempo Argentino)

No hay comentarios:

Publicar un comentario