“¿ALGUNO ME ESCUCHÓ HABLAR DE REELECCIÓN EN 2011? NO SE HAGAN LOS RULOS”, ADVIRTIÓ

La presidenta mantuvo el suspenso

Publicado el 2 de Marzo de 2011

Por Viviana Mariño

Cristina evitó las definiciones y desacreditó los ensayos sobre una reforma constitucional para posibilitar su permanencia en 2015. “Hablar de eternidad es un chiste de humor negro”, argumentó.

Fue un mensaje enfático dirigido tanto al oficialismo como a la oposición. La presidenta Cristina Fernández aprovechó el acto de apertura de sesiones ordinarias del Congreso Nacional para negar que impulse una reforma constitucional que posibilite una potencial segunda reelección en 2015. “¿Alguno me ha escuchado a mí que voy a ir por la reelección en 2011? No se hagan los rulos”, argumentó. La mandataria eligió rodear de misterio sus intenciones de competir en las elecciones del domingo 23 de octubre para, desde ese lugar, desacreditar las versiones sobre un plan oficial de permanencia indefinida en el poder.

Esa hipótesis adquirió un inesperado vuelo mediático en las horas previas al discurso de Cristina frente a la Asamblea Legislativa. Fue a partir de una declaración de la diputada nacional Diana Conti quien habló del deseo de sectores del ultrakirchnerismo de impulsar una reforma de la Carta Magna porque aspiran a una “Cristina eterna”. Aunque la legisladora relativizó el alcance de sus dichos horas después, la argumentación generó una fuerte reacción crítica de la oposición. En simultáneo, funcionarios cercanos a la presidenta consultados por Tiempo Argentino le restaron trascendencia al episodio, hablaron de una opinión a “título personal” pero dejaron trascender el malestar de Cristina con la idea de “eternidad”, un concepto alejado del respeto a la institucionalidad que la presidenta planteó desde 2007 como un eje de gestión de gobierno. Ayer, la mandataria fue sin vacilaciones a ese punto. “Hablar de eternidad parece un chiste de humor negro”, subrayó. Y agregó: “Si no he logrado una minoría simple para una norma que han tenido todos los presidentes como es el Presupuesto, ¿a quién se le ocurre lo de la reforma constitucional?”.

Aunque en el gobierno admiten que la proyección de una reforma formaba parte de los comentarios en privado de dirigentes del denominado universo del ultrakirchnerismo, las expresiones de Conti fueron, cuanto menos, desafortunadas en relación a los tiempos, ya que la presidenta ni siquiera formalizó aún su intención de ir por la reelección en 2011. Sin embargo, la mandataria apuntó especialmente a la lectura de los referentes opositores y a la amplificación mediática de ese prematuro debate electoral. “Lo que están tratando de hacer es lo que siempre hicieron: campañas difamatorias utilizando la palabra de alguna compañera o compañero que siempre me quiso mucho o de algunos que ahora me quieren más que antes”, explicó.

La decisión de Cristina de dejar en suspenso cualquier definición sobre su candidatura para este año contrastó con el clima de fervor reeleccionista que sobrevoló el recinto durante la hora y cuarenta minutos que duró el discurso y, especialmente, la Plaza de los Dos Congresos. Allí, con marcada presencia de jóvenes, se reunieron militantes de agrupaciones, sociales y gremiales. Todos se unieron en firmes consignas a favor de la reelección presidencial. Tampoco faltó el recuerdo de Néstor Kirchner: el tradicional pingüino inflable estrenó alas de ángel bajo el sol del agobiante mediodía.

(fuente: Tiempo Argentino)